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VALLECAUCANO ALCALDE EN ESTADOS UNIDOS DE NORTEAMÉRICA
Por Manuel Tiberio Bermúdez – periodista independiente
www.somosvallecaucanos.com presenta una sorpresiva historia acerca del Vallecaucano que logró coronarse Alcalde en U.S.A. Nuestro colaborador, Manuel Tiberio Bermudez, presenta la siguiente entrevista con Javier Marín.
La ciudad de Dover, en el estado de New Jersey, en los Estados Unidos de Norteamérica, no significa mucho para la mayoría de los colombianos; en cambio, para personas de regiones como Caicedonia, Sevilla, en el Valle del Cauca y Montenegro, en el departamento del Quindío, tiene un especial significado, pues en esa pequeña ciudad norteamericana y sus alrededores, han sentado su trashumancia varios cientos de vallecaucanos y quindianos.
Pero hoy en día ese pueblo ha ido ganando fama ya que allí tiene la sede de gobierno el primer alcalde colombiano que tiene una ciudad de Norteamérica. Por primera vez en la historia, un colombiano logra ganar unas elecciones en territorio americano, lo que dice mucho del espacio político que se han abierto los hispanos en los Estados Unidos, pero dice mucho más de la capacidad de liderazgo que están adquiriendo los latinos en USA.
Dover New Jersey, la población que con su voto llevó a un Colombiano a regir sus destinos, fue fundada en 1722 por John Jackson y en sus inicios se convirtió en un centro minero gran productor de hierro. Esto hizo que la pequeña ciudad fuera, en aquella época, un afamado centro industrial y comercial. El pueblo esta localizado en Morris County al norte del estado de New Jersey, vecino a la cosmopolita New York. Queda a unos 70 kilómetros de Manhattan y a la misma distancia del estado de Pensilvana.
Aunque la ciudad forma parte de las famosas montañas Apalaches, la altura máxima en su territorio, no rebasa los 800 metros. En la actualidad Dover cuenta con unos 18 mil residentes, el 57% de ellos son hispanos.
ALCALDÍA DOVER: UN MOÑTAÑERO
Se llama Javier Marín y nació en Sevilla, Valle del Cauca, una ciudad que huele a café, y que celebra anualmente el más grande festival de música de carrilera o música “montañera” y el ya famoso Festival Bandola que congrega a los mas importantes músicos de Colombia.
Recién llegado a los Estados Unidos, el hoy Alcalde de Dover, tuvo que hacer el curso obligatorio que hacen todos los emigrantes: trabajar en restaurantes, factorías, tiendas y sentir en piel propia las angustias del recién llegado.
Pero, para conocer un poco más sobre la personalidad y el pensamiento de éste sevillano que ha marcado un hito en la historia de los colombianos emigrantes al país del Tío Sam, tenemos esta entrevista que el muy amablemente concedió. Javier Marín, es hijo de Orlando y Lucila Marín, dos colombianos que un día partieron en busca de mejores oportunidades para ellos y su familia.
Manuel Tiberio: ¿Qué circunstancias motivan su llegada a los Estados Unidos, y qué razones le llevan a dejar su tierra natal?
Javier Marín: Familiares de mi padre, quienes vivía aquí desde los 70, se hicieron ciudadanos americanos y nos pidieron como residentes permanentes en 1984. Durante este tiempo la Universidad Tecnológica de Pereira, donde cursaba primer semestre de medicina entró en huelga, lo que me hizo más fácil tomar la decisión.
M T: ¿Cuánto tiempo lleva viviendo en los Estados Unidos?
JM: Desde abril de 1984
M T: ¿Qué educación tiene en los Estados Unidos y qué títulos ha obtenido en ese país?
JM.- He sido gerente de bancos por los últimos doce años, actualmente gerencio una compañía de envíos de dinero desde diciembre del 2003. Tengo una carrera media en administración de empresas.
M T: ¿Cómo fueron sus inicios en los Estados Unidos?
JM: Llegué a estudiar, pero al principio hice todos los trabajos que los inmigrantes suelen hacer aquí, como trabajar en restaurantes, tiendas y factorías.
M T: ¿Cuándo y por qué decide incursionar en la política y cuáles son los primeros pasos en ella?
JM: A diferencia de la opinión pública no soy político ni me llama la atención la política. Me envolví por la necesidad de mejorar la calidad de vida de la gente de Dover.
M T: ¿Qué acciones realiza en favor de los latinos para ir ganando el aprecio de esta comunidad?
JM.- Mi prioridad con referencia a los latinos es educacional. Tratar de que todos entendamos qué es necesario para poder vivir en Estados Unidos y para ser valorados como personas. Infortunadamente no tengo ninguna autoridad en términos de inmigración. Pero en general todos venimos aquí buscando un mejor estilo de vida y en ese sentido se trata de trabajar con toda la comunidad. Desde el principio dije que mi intención no era ser el alcalde de los hispanos sino de toda la comunidad. De otro modo habría discriminación reserva, y eso ha demostrado no ser bueno para ninguna comunidad.
M T: ¿Qué piensa de la decisión de ser un emigrante que tienen que asumir muchos de sus compatriotas?
JM.- Personalmente pienso que es una decisión difícil. Ser emigrante legal a cualquier país acarrea problemas de cultura e idioma. Pero ser emigrante indocumentado acarrea un sinnúmero de riesgos que pueden afectar el futuro de la vida del individuo ó su familia. Realmente la vida del inmigrante indocumentado en Estados Unidos está tan difícil, que no se la recomiendo a nadie. Pero para aquellos que llegan con visa de residente legal, es una gran oportunidad si se sabe aprovechar.
M T: ¿ Considera Ud., que la solución para las familias es emigrar o deberían de luchar en sus países de origen en busca de mejores y nuevas oportunidades?
JM.- Sabiendo lo que sé ahora, yo creo que son más valientes los que se quedan luchando para cambiar el país. Personalmente, aun con los avances que he logrado aquí, no estaría preparado para una posición política en Colombia. Considero que la solución es mejorar el estilo de vida de todos los Colombianos que viven en Colombia. Lastimosamente la corrupción está tan arraigada que sería un proceso de concientización social y una reforma política total.
M T ¿Qué lo decide a postular su nombre a la alcaldía de Dover y como fue la campaña?
JM.- La necesidad de mejorar la vida de los habitantes de Dover, de los cuales 60% somos hispanos, pero no teníamos representación, y cuyo poder electoral solamente alcanza el 20%.
M T ¿Cuáles son los compromisos de un alcalde en una ciudad de Estados Unidos...que le corresponde hacer? Tiene burocracia a su cargo? Tiene presiones de algún tipo: políticas, económicas etc. Qué desea lograr para los habitantes de Dover que no haya hecho otro alcalde?
J M: La posición de alcalde es de tiempo parcial, por lo tanto mantengo mi trabajo de tiempo completo para sustentarme. La alcaldía paga poco más de US $6.000 anuales, lo que lo hace un trabajo casi voluntario. Mi función es de dirigir los procesos de la municipalidad por medio del administrador municipal, quien es el profesional a cargo de las tareas diarias. Además soy también el presidente del consejo, lo cual me da poderes ejecutivos y legislativos.
Mi meta principal es crear más fuentes de trabajo por medio de apoyar la pequeña y mediana empresas, al mismo tiempo que la necesidad de crear más comercio local por medio de un redesarrollo económico. También tenemos la necesidad de crear más áreas recreacionales para los niños, adultos y ancianos.
El problema del hacinamiento es serio en Dover, por lo tanto estoy trabajando con organizaciones sin ánimo de lucro para crear más vivienda para personas de bajos recursos.
M T: ¿Cree que desde el cargo como alcalde puede ayudar a la comunidad latina y de ser así como se reflejaría esa ayuda?
J M: El papel más importante que yo quisiera servir es el de demostrar que sí se puede. Nunca he creído en dar ó recibir algo que no sea información ó educación. Considero que llegamos más lejos si en vez de darle un pez a alguien le enseñamos a pescar. Por ende, mi interés es que los inmigrantes aprovechemos las oportunidades que tenemos aquí para adquirir el poder económico y político. Me gustaría pensar que mi gestión sirviera como ejemplo para que otros hispanos se envuelvan y tomemos rumbo de nuestro propio destino
M T: ¿Quién es el ser humano Javier Marín? Cómo lo definiría?
JM.- Javier Marín es amistoso, confiable y comprensivo. Lastimosamente no perdona a quienes hacen daño, ni vuelve a confiar en quien lo traiciona.
Creo que mi mejor habilidad es que me enfoco en algo y busco el modo de alcanzarlo- soy tenaz y recursivo.
Mi desventaja es que le doy valor a todo, y por lo tanto, situaciones que pueden ser insignificantes para otras personas, pueden jugar un papel crítico en mis decisiones. Para mi la franqueza es crítica, pero es un arma de doble filo porque se crean muchos enemigos.
DESNUDO
¿Que le pone alegre?
Todo. Veo la belleza y el valor aun en las peores situaciones.
¿Qué le produce tristeza?
Ver que la gente desaprovecha oportunidades- sobretodo gente joven y con potencial. Eso es lo más frustrante que he encontrado en mi vida.
¿Qué extraña de Colombia?
Todo y nada. Me gustaría volver a compartir con mis viejos amigos, la comida, las celebraciones, la navidad, etc. Pero como llevo a Colombia dentro de mí, eso hace que no sufra de la melancolía que muchos otros padecen.
¿Cómo esta compuesto su núcleo familiar?
Mi esposa Gina, y mis hijos Julia, Claudia, Cassandra, Byron y Leahnna.
¿Un frase o pensamiento que le sirva de guía para caminar por la vida?
No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy.
¿Qué piensa del conflicto que vive Colombia y cómo lo percibe desde la distancia y desde la seguridad que le ofrece la lejanía?
Pienso que la irresponsabilidad política y la corrupción han llevado al pueblo Colombiano a sufrir experiencias inimaginables en mi generación. Siento que es una lástima que el conflicto haya llegado tan lejos, y que la ignorancia y la avaricia de algunos no hayan permitido que el pueblo en su mayoría pueda progresar. Aun aquellos que tienen potencial y con sufrimiento adquieren educación terminan la universidad para un sistema que solo ofrece desempleo.
¿Le gustaría volver a vivir a Colombia (en caso afirmativo porque sí y en caso negativo porque no).
En este momento no. Mis hijos están creciendo y no justificaría quitarles la seguridad y oportunidades que tienen aquí. Sin embargo, si me gustaría volver cuando ellos crezcan y me jubile. Mi única reservación con eso sería el hecho que soy tan bocal en términos de lo que considero justo ó injusto, que no se si podría vivir en paz siendo un simple espectador de la pérdida de los valores éticos y morales con los que crecí.
Es el primer colombiano que dirige los destinos de una ciudad; el primer paso de los muchos que la comunidad colombiana ha dado en los Estados Unidos con éxito, aportando su ingenio y fuerza de trabajo que de alguna manera hace más grande ese sueño de muchos: los Estados Unidos de Norteamérica.
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